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Los reguladores chinos anunciaron el viernes nuevas restricciones a los videojuegos en línea, que según ellos tienen como objetivo reforzar la gobernanza de la industria y proteger a los menores del país.
Las reglas propuestas, que están sujetas a comentarios públicos antes de ser definitivas, son las últimas de varias rondas de restricciones impuestas a la industria en los últimos años. El plan requeriría que los usuarios tuvieran límites de gasto en plataformas de juegos y prohibiría a los menores dar propinas a los transmisores en vivo de videojuegos.
El borrador de las reglas, emitido por la Administración Nacional de Prensa y Publicaciones, también buscaría reducir los incentivos para que los jugadores sigan regresando al prohibir que las compañías de juegos ofrezcan recompensas por los registros diarios. Además, las reglas requerirían que los servidores informáticos y otros equipos utilizados por las compañías de juegos estén ubicados en China y estipularían que el contenido del juego no debe contener secretos de estado ni poner en peligro la seguridad nacional.
El contexto: La campaña comenzó reprimiendo el tiempo dedicado a jugar.
En 2019, las autoridades chinas atacaron lo que creían que era un problema de adicción a los juegos en línea entre los menores, estableciendo límites de tiempo diarios para los jugadores menores de 18 años. Desde entonces, esas restricciones se han endurecido. Hace cuatro meses, los reguladores propusieron reglas que requerirían un “modo menor” en los dispositivos móviles para limitar el tiempo frente a la pantalla y limitar el contenido para los escolares.
El gobierno ha librado una guerra más amplia contra la industria tecnológica en los últimos años, buscando controlar el comercio electrónico, la tecnología financiera y las empresas de transporte compartido que decidió que se habían vuelto demasiado poderosas. Como resultado, empresas que alguna vez fueron tan grandes como sus contrapartes estadounidenses han perdido colectivamente billones de dólares en valor de mercado.
Los reguladores obstaculizaron los juegos en línea al retrasar durante ocho meses la emisión de licencias necesarias para que los editores publiquen nuevos juegos, y finalmente pusieron fin a la suspensión en abril de 2022.
Por qué es importante: China domina la industria.
Según una investigación realizada por Goldman Sachs, un banco de inversión, la industria del juego en línea de China ocupa el primer lugar en el mundo tanto en número de usuarios, 650 millones el año pasado, como en ingresos, 45 mil millones de dólares.
El anuncio de las reglas propuestas hizo caer los precios de las acciones de las compañías chinas de videojuegos: Tencent cayó alrededor de un 12% y Netease cayó un 25%.
En Weibo, la plataforma de redes sociales de China, un comentarista criticó la propuesta como contraproducente cuando la economía de China está en dificultades: «Ahora sabes quién está reprimiendo la economía de China, ¿verdad?».
La Administración Nacional de Prensa y Publicaciones aceptará comentarios del público y de la industria sobre las reglas hasta el 22 de enero. Por tanto, la propuesta podría modificarse antes de que entre en vigor.
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